Las máquinas tragamonedas se han convertido rápidamente en uno de los juegos de casino más lucrativos, pero su invención no siempre fue un proceso automático. Un mecánico bávaro llamado Charles Fey fue el pionero que inventó estas máquinas.
Diseñó máquinas tragamonedas de tres carretes basadas en el principio de alinear símbolos a lo largo de una línea imaginaria, seguida de aceptadores de billetes que indicaban el juego de créditos.
Orígenes
Charles Fey inventó las máquinas tragamonedas en 1894 y pronto se convirtieron en el pan de cada día de los casinos, representando hasta el 85% de los ingresos. Estos carretes giratorios con símbolos que pagan cuando se alinean en un camino recto a lo largo de la pantalla rápidamente se volvieron inmensamente populares; ¡Hoy en día, la máquina más utilizada tiene cinco carretes y 40 formas de ganar!
La máquina de Sittman y Pitt en Brooklyn, Nueva York, fue un primer paso en la evolución de las máquinas tragamonedas. Presentaba cinco tambores que contenían 50 caras de cartas para simular manos de póquer; los jugadores insertaban monedas de cinco centavos y tiraban de palancas, con la esperanza de obtener combinaciones ganadoras que no pagaran dinero directamente; En su lugar, se ofrecieron premios como puros o cerveza. Más tarde llegaron máquinas más avanzadas; La Bally Company de Chicago produjo el dispositivo electromecánico Money Honey en 1963 que proporcionaba tolvas de monedas sin fondo y pagos automatizados.
Símbolos
Las máquinas tragamonedas presentan varios símbolos. Algunos son simplemente estándar, mientras que otros pueden aumentar las probabilidades de éxito de los jugadores; por ejemplo, los multiplicadores pueden multiplicar cualquier combinación ganadora que formen, como se indica en su tabla de pagos y generalmente está marcado con un ícono.
Charles Fey inventó por primera vez la máquina tragamonedas Liberty Bell en 1887. Esta primera máquina tragamonedas mecánica utilizaba carretes mecánicos giratorios para mostrar símbolos y determinar los pagos de manera más simple que las máquinas anteriores basadas en póquer; sin embargo, las leyes antijuegos de California restringieron los pagos inmediatos en efectivo.
Herbert Mills de Chicago amplió rápidamente la producción, añadiendo a sus máquinas símbolos de frutas y el clásico símbolo de barra que todavía se utiliza hoy en día, así como una función de pago automático con paradas escalonadas que hacían que los pagos fueran más automáticos.
Pagos
Los pagos de las máquinas tragamonedas se calculan en función del número de paradas realizadas en un carrete y sus probabilidades de aparecer, utilizando un generador de números aleatorios; Se utilizan procesos similares al calcular los pagos de otros dispositivos de juego como el video póquer y el keno.
Bally presentó su innovadora máquina tragamonedas electromecánica llamada Money Honey en la década de 1960. Los jugadores podían accionar una manija y automatizar la distribución de hasta 500 centavos automáticamente: un paso adelante innovador que permitió funciones más complejas y límites de apuestas más altos.
La máquina Liberty Bell de Charles Fey introdujo símbolos más reconocibles, sentando las bases de lo que conocemos como símbolos de frutas en los juegos de tragamonedas modernos. Además, se agregaron funciones de parada escalonada y un mecanismo de pago automatizado.
Rondas de bonificación
Industry Novelty Company creó las primeras máquinas tragamonedas con el objetivo de eludir las leyes de juego diseñándolas para que se parecieran a máquinas de chicle y otorgaran chicle como premio, ocultando así sus funciones de juego y encontrando grupos dedicados de jugadores para estas máquinas. Si bien esto fue ciertamente un progreso, estas primeras máquinas todavía no eran experiencias muy emocionantes.
La máquina Liberty Bell de Charles Fey marcó un avance importante en la historia de las máquinas tragamonedas. Disminuyó las posibles combinaciones y permitió pagos automáticos, además de agregar símbolos de frutas que se asociaron con los juegos de tragamonedas en todo el mundo. Estos cambios ampliaron enormemente su popularidad, presagiando su popularidad mundial.
Reglamentos
Las máquinas digitales abrieron nuevas posibilidades para los juegos de tragamonedas. Ya no se limitan a carretes mecánicos y símbolos estáticos, las máquinas digitales abrieron el camino para gráficos ricos, animaciones dinámicas y pantallas vibrantes, sin olvidar los generadores de números aleatorios que proporcionan resultados más aleatorios que sus predecesores mecánicos.
Charles Fey inventó por primera vez la máquina tragamonedas en 1895; sin embargo, su adopción generalizada no se produjo hasta después de la Segunda Guerra Mundial, cuando los gobiernos reconocieron su potencial como fuente de ingresos fiscales. Las máquinas tragamonedas de hoy son máquinas sofisticadas y atractivas que ofrecen a los jugadores oportunidades de ganar grandes premios, brindándoles anticipación y decepción al ganar o perder, manteniéndolos cautivados durante horas y llegando a audiencias más amplias que nunca a través del desarrollo tecnológico.